Un proyecto de Anabella Pareja Robinson e Itxaso Corral Arrieta.
Hace meses, que casi son años, que recién nacimos. Dimos a luz y nacimos de nuevo, comenzamos nuevos tanteos y nos pusimos tiernas y temblorosas. Como no sabíamos muy bien qué hacer con tanto descubrimiento desbordante y queríamos cuidar esa vibración del no saber, decidimos escribir unos diarios de escritura breve y fragmentada.
Llevamos meses escribiendo estos diarios, inspirados en nuestros maternares, que nos van descubriendo prácticas cotidianas que tienen que ver con cómo nos cuidamos, nos acompañamos y nos aprendemos. Prácticas que nos van configurando con sus formas continuas y persistentes, prácticas que van creando mundo y recordándonos a cada instante los retos del ser intersostenidas, entretejidas.
Hace meses, que casi son años, que recién nacimos. Dimos a luz y nacimos de nuevo, comenzamos nuevos tanteos y nos pusimos tiernas y temblorosas. Como no sabíamos muy bien qué hacer con tanto descubrimiento desbordante y queríamos cuidar esa vibración del no saber, decidimos escribir unos diarios de escritura breve y fragmentada.
Llevamos meses escribiendo estos diarios, inspirados en nuestros maternares, que nos van descubriendo prácticas cotidianas que tienen que ver con cómo nos cuidamos, nos acompañamos y nos aprendemos. Prácticas que nos van configurando con sus formas continuas y persistentes, prácticas que van creando mundo y recordándonos a cada instante los retos del ser intersostenidas, entretejidas.